top of page
Foto del escritorJimena Femat

La casa de mi abuela

IDENTIDAD: Conjunto de rasgos o características de una persona o cosa que permiten distinguirla de otras en un conjunto.


Al diseñar desde un inicio con intensión y ésta es respetada a lo largo de todos los procesos que debe tener un proyecto, obtenemos como resultado espacios con IDENTIDAD Y/O PERSONALIDAD fuertes y visibles.

La identidad de un diseño impacta directamente en su fuerza visual. Un diseño carente de ésta no está completo y por ende no produce una experiencia completa, es decir no suscita emociones y pasa a segundo plano, en términos de memoria... se desvanece.


Para mí, la identidad forma parte inherente de todo. Cada cosa, así como tiene diseño, también tiene una identidad.


Qué nos hace únicos e irreemplazables?


En el caso del ser humano, nuestros genes, ancestros, vivencias, memoria consciente y subconsciente, la gente que nos rodea, y la que ya pasó, todo lo anterior va integrando, en diferentes proporciones y formas, parte de nosotros.

Ahora abordemos este tema desde la perspectiva del diseño:

Los criterios que se marcan (proponen) al concebir un diseño, sus materiales, texturas, colores y vibra, integran su identidad. Estos valores que acabo de mencionar, son fundamentales e imprescindibles (haz de cuenta que es su ADN), tienden a ir cambiando en ciertos matices a lo largo del proyecto por diferentes razones, como cuestiones económicas, tiempos de entrega, existencias, etc, pero siempre respetando la identidad del mismo.


Como ya les he platicado, la casa de mis abuelos maternos es, una gran influencia/inspiración en mi vida y, es ahí donde se inicia el desarrollo de ésta pasión que hoy día sigo alimentando; es por eso que les platico con mucha tristeza y nostalgia lo siguiente:

Dicha casa es de ésas tipo las de las películas de Mauricio Garcés: Con espacios grandes y pisos claros, de figuras geométricas bien definidas, rodeada de patio con muros verdes forrados en monedita y llena de ventanales, o sea... completamente I-LU-MI-NA-DA. Ésa es su identidad... Es una casa con gran personalidad. Algo que en PUR.PUR.A nos gusta llamarle OBJETO, ya que por sí misma ofrece, o en éste caso, ofrecía, una experiencia completa en cuanto a diseño. Antes, tenía un ventanal en el área de doble altura, que colindaba con las escaleras de caracol, y por ahí, podías ver el árbol de higos, súper frondoso, que estaba en el patio, . Y, en la sala, las ventanas de piso a techo en escuadra terminaban de darle el toque interesante y fuerte que solía tener, integrando el exterior con el interior de la propiedad, sin dejar atrás su privacidad.


Con el tiempo, la familia fue creciendo, y esas navidades en donde estábamos todos juntos (los 7 hijos de mis abuelos con sus respectivas familias, las mascotas & la comida para un ejército por eso la cocina tan grande) y la casa quedaba a reventar de gente, se fueron perdiendo. Mi abuelo se fue y con él la fuerza y ganas de mi abuela de mantener la casa para todos nosotros. Poco a poco la razón de mantener todo a flote iba perdiendo el sentido. Con los años, alguien más se hizo cargo, y comenzó el cambio. La dificultad para mantener la casa en su máxima expresión, por una u otra cosa, orillaron a los responsables a tomar decisiones que impactaron permanentemente el diseño como la de deshacerse de dichos ventanales, de quitar la vegetación exterior, rentar una parte del patio, entre otras. Y, al mismo tiempo, el mobiliario y los accesorios que vestían los interiores, se iban deteriorando al punto de necesitar reemplazo, utilizando cosas más modernizadas y fáciles de encontrar y reemplazar.


Ahora sí que, de ser una casa excepcional, con una personalidad fuerte y marcada, se convirtió en una casa más, ya no aporta la contención, cohesión o armonía que antes. No me malentiendan, la casa sigue siendo hermosa, y creo que difícilmente dejaría de serlo, sin embargo ahora no tiene la fuerza visual que solía tener. :(


Si la gente responsable del inmueble hubiera entendido y sido leal a identidad del mismo, la casa conservaría su intensión y, por ende, su personalidad.


Éste es unos de los casos en donde se pierde la intensión del diseño en el trayecto, en otras ocasiones las prisas o el presupuesto nos llevan a tomar decisiones que impactarán positiva o negativamente el resultado final. Y, con esto no quiero decir que no podemos cambiar un estilo, o una intensión.... Pero sí digo que tenemos que tomar en cuenta las características iniciales para enaltecerlas debidamente.


Conclusión: SEAMOS FIELES AL ORIGEN DE NOSOTROS MISMOS Y DE LA INTENSIÓN.


27 visualizaciones0 comentarios

Comments


bottom of page